Ayer despinté por completo a Yssi, cosa que me costó una hora de mi tiempo y las huellas dactilares de la mano derecha (ahora puedo robar impunemente), pero a falta de una rociadita de MSC ya está lista para un nuevo experimento pinturero. Veremos lo que sale, aunque esta vez soy más optimista porque tengo un poco más claro lo que voy a hacer.
En Elfdoll han vuelto a poner a la venta la cabeza de Soah (la versión oriental de mi Sooah. También han sacado la versión sonriente que me pacere bastante cutre) y me está tentando horrores cambiarle la cabeza a Eva para que cuadre más con la idea primigénia de su personaje, pero desde luego debería dejar de llamarse Eva y tengo sentimientos encontrados sobre ese cambio, porque Eva lleva ya un buen rato conmigo (a lo tonto el mes que viene ya hace un año que compré su cabeza) y aunque a veces la encuentro un poco sosa para las fotos en persona tiene más presencia.
Pero no sé qué hacer. Porque la Soah es mucho más guapa y la cabeza de la actual Eva la podría dejar para su hermano. Tengo que pensarlo bien.
Y como anécdota del día hoy he recibido un paquete de Latidoll de un pedido que hice allá por Marzo... y que recibí en Abril. Lati me ha enviado 2 veces el mismo pedido. Yo solo he pagado una vez. Ahora tengo 2 uniformes de marinerita.
Mi primer impulso fue ponerlo en el mercadillo, pero después recapacité, porque con el Libra (alias Eris, que no Erin como dije en un principio) me vino un traje de marinerito para chico que creo que le calzará bien a Akai. Así que tengo a Akai y a Eris con uniforme y tengo otro recién llegadico. Y tengo una Tita que podría aprovecharlo.
A lo tonto creo que mis niños van a ir al cole privado en uniforme marinero XP Me hace gracia la idea de ponerlos todos cursis y remilgados para la foto del colegio, necesitaría mini uniformes para los Jodie, o mejor, babis de preescolar. Y si Lati tiene a bien enviarme otro uniforme para Amelia pues tampoco les diré que no!
Por cierto, en este paquete me han enviado un pai-pai que no me habían enviado en el otro, que poca vergüenza!
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